Las chilenas y chilenos no se han quedado precisamente ajenos a la tendencia mundial que se han transformado las cirugías estéticas en los últimos años. Sin embargo, debido a muchas veces la falta de información, las complicaciones y riesgos no han quedado exentos de los procedimientos, incluso teniendo un resultado fatal para los pacientes.
Por Maximiliano Chandía, Paula López y Alexandra Urzúa
Durante la noche del pasado 11 de marzo se confirmó la muerte de Tania Cea, una joven de 20 años que falleció, debido a un paro cardiorespiratorio luego de realizarse una abdominoplastia, dentro de la Clínica Acuario. La familia de la víctima llegó hasta las dependencias de la clínicas ubicada en la comuna de Providencia en función de reclamar una posible negligencia médica, situación que acabó con agresión a funcionarios, lanzamiento de piedras y vidrios rotos, de acuerdo a la información recogida por 24 Horas de TVN.
El caso de Tania se suma la muerte de Cynthia Vergara, una mujer de 33 años que también falleció luego de someterse a una abdominoplastia el pasado 26 de enero, en el Centro Médico Quirúrgico de Especialidades Chile Salud. En el caso de Cynthia, su familia también denuncia negligencias médicas, en una operación por la que se pagó menos de la mitad del costo promedio.
Según Radio Bio Bio la mujer presentó complicaciones durante el procedimiento que duró aproximadamente cuatro horas, por lo que fue trasladad a la ex Posta Central con una perforación en el hígado y donde estuvo en estado de gravedad hasta el 8 de febrero, cuando falleció debido a la falta de oxígeno en su cerebro.
Ambos casos evidencian una falta de fiscalización a estos centros y clínicas, así como también la poca información a la que acceden las personas cuando deciden someterse a cualquier procedimiento de este tipo, ya que muchas veces en búsqueda de ahorrar dinero lo hacen en lugares o con médicos no autorizados.
¿Quién Fiscaliza?
Actualmente, Chile se encuentra al debe en cuanto a materia de fiscalización tanto de clínicas como cirujanos plásticos (no basta sólo con tener el título de médico cirujano). De hecho, el único órgano encargado de regular es la Seremi de Salud, la cual solo lo hace en caso de denuncia por negligencia médica y abocado específicamente a aspectos de infraestructura.
Lo anterior facilita la existencia y funcionamiento de clínicas estéticas ilegales y peor aún, facilita que centros registrados y aparentemente apegados a la norma, no cuenten con los implementos necesarios ni cumplan con las reglas de salubridad necesarias para llevar a cabo procedimientos de este tipo.
Si bien hay otros factores negativos y nocivos para quienes opten por someterse a una operación así, como el económico, los dolores post operatorios, entre otros. La deficiente regulación es, por lejos la que tiene un mayor impacto pues va más allá de las precauciones pre operatorias, como lo es el chequear muy bien el lugar y el tipo de profesional al cual se confiará la vida. Esto dado que, por lógica, al no contar con un sitio o consultoría que certifique el lugar, ¿Cómo saber si está en regla o no?, ¿Cómo confiar realmente si no se sabe la regularidad con que se fiscalizan las maquinarias e implementos médicos?.
De este vacío, es del cual se aprovechan los encargados/as inescrupulosos de clínicas irregulares y no certificadas para promocionarse de la manera más llamativa posible, y con valores que bordean lo irrisorio en cuanto al ahorro.
A continuación, te presentamos un podcast que explicará este tópico a través de más palabras del Presidente de la Sociedad de Cirujanos Plásticos en Chile, Claudio Thomas. Tomando como ejemplo el caso de la joven Evelyn, quien se enteró a través de la plataforma Facebook de un lugar donde realizaban la Bichectomía (se explica en el podcast) a menos de la mitad del precio normal. Esta experiencia llevó a Evelyn a arrepentirse de confiar y, por ahorrarse unos pesos, haberse convertido en una nueva Tania o Cynthia.
Así como las tres víctimas ya mencionadas, existen una larga lista de eventos que han tenido lugar en nuestro país y que dan cuenta de los riesgos asociados a estas prácticas ilegales, la irresponsabilidad de quienes se someten sin una debida indagación previa del lugar y, sobretodo, la falta de fiscalización y verificación constante del buen funcionamiento de estos recintos
Aumento progresivo de las cirugías estéticas en Chile
Actualmente parece ser cada vez más difícil lograr la aceptación del cuerpo, por ende las personas acceden en mayor medida a las cirugías estéticas como parte de esta búsqueda por tener el cuerpo ideal. De acuerdo a datos manejados por La Rebelión del Cuerpo, un 86% de las mujeres chilenas reconoce haber dejado de realizar algo debido a la falta de aceptación y amor al cuerpo propio, mientras que esta cifra en los hombres es de un 53%.
Al mismo tiempo, los datos recogidos por el colectivo social por medio de una encuesta de opinión online a nivel nacional, señalan que las mujeres pasan alrededor de 3,6 horas cuestionando su cuerpo. Los estereotipos de género que aún existen en nuestro país dificultan aún más el amor propio entre las personas, especialmente de las mujeres jóvenes.
Dentro de la misma encuesta realizada por La Rebelión del Cuerpo, se supo que las cirugías estéticas se han triplicado durante los últimos 10 años en Chile. El público principal de éstas han sido personas jóvenes entre 20 y 35 años.
El sitio web de América Retail, luego de realizar un estudio en 2019, señala que “Los millennials, a nivel mundial, se inclinan primero por aumento mamario, luego liposucción y la rinoplastía, mientras que en la tercera edad las preferencias cambian, siendo la liposucción las más requerida, seguida por el aumento mamario y rinoplastia”.
Aunque si bien el público más joven ha tenido una inclinación por las cirugías y tratamientos estéticos, esto no quiere decir que un público más adulto, o incluso perteneciente a la tercera edad, haya dejado de someterse a procedimientos de este tipo.
“La tendencia mundial en números se traduce en que los procedimientos quirúrgicos entre el periodo 2015-2017, en millennials, creció de la siguiente forma: aumento mamario 2,7%, liposucción 4% y la rinoplastia un 15%. Sin embargo, en la tercera edad la demanda de estos tratamientos explotaron con un 110% aumento mamario, 84% la liposucción, y un 35% la rinoplastia, en el periodo estudiado”, señala América Retail en su página web.
Al mismo tiempo, las cirugías estéticas también han aumentado en el público masculino. En una entrevista a Radio Bio Bio, el cirujano plástico de Clínica Vespucio, Rodrigo Vielma, señaló que “los hombres también se ven cautivados por la idea de cambiar su aspecto en poco tiempo”. De acuerdo al especialista, la razón del aumento de cirugías tanto en hombres como en mujeres jóvenes, se debe a que este grupo etario asocia el éxito con la apariencia.
“La intervención más común en hombres jóvenes es la liposucción de la región mamilar, seguida por el mismo procedimiento en abdomen y cintura”, según detalla Vielma. La sociedad chilena parece caracterizarse por considerar fundamental la buena imagen, y es indispensable eliminar aquellas características indeseables respeto a cánones y estereotipos de belleza impuestos, de acuerdo a lo descrito por el psicólogo Hardy Schaefer también a Radio Bio Bio.
Cuidados pre y post operatorio
Independientemente del sexo y edad del paciente, antes de una intervención estética (y de cualquier tipo) es esencial preparar cuerpo y mente para enfrentar el estado de debilidad temporal que implica entrar a pabellón. “Es recomendable comer en forma saludable todos los días previos, evitando alimentos que produzcan posibles cuadros gastrointestinales e irritabilidad”, explicó la enfermera de 26 años egresada de la Universidad de Santiago de Chile, María Francisca Urzúa Olguín.
Además, se debe mantener un consumo de agua adecuado a las necesidades previas a la cirugía, considerando que la mayoría de las intervenciones estéticas generan una notoria pérdida en el volumen, deshidratación y bajas en la presión arterial (hipotensión arterial).
En cuanto a los exámenes médicos necesarios para enfrentar estos procedimientos, la especialista anteriormente mencionada destaca que se debe realizar un chequeo completo que incluya:
-Hemograma
-Perfil bioquímico
-Pruebas de coagulación
-Electrocardiograma
-Exámenes de imágenes (en algunos casos)
-Preoperatorio: cuidado mes a mes
“Es fundamental descartar casos de anemia, diabetes mellitus, alteraciones de la función renal, de coagulación y/u hormonal”, advierte la enfermera. Además, se debe controlar el corazón, identificar posibles hernias si se opera el abdomen y patologías mamarias si se interviene los senos.
En síntesis, los cuidados previos van desde el mes, la semana y 24 horas anteriores a la cirugía.
Idealmente, los pacientes deben dejar de fumar y beber alcohol un mes antes y uno después de la cirugía. “Está demostrado que el tabaco interfiere con la anestesia y con la cicatrización, aumentando la probabilidad de complicaciones”, afirma María Francisca. Un consumo significativo de alcohol puede alterar la función hepática, y tanto la cirugía como el postoperatorio, implican el uso de medicamentos que requieren del óptimo funcionamiento del hígado.
Una semana antes, se deben considerar cuidados especiales para no contagiarse con infecciones virales o bacterianas que puedan comprometer el estado general o hacer que éste desarrolle cuadros febriles.
Un día antes, se recomienda realizar un pre-ingreso en la clínica en la que se llevará a cabo la operación, para que durante la jornada de la cirugía no existan imprevistos y el paciente esté más tranquilo.
Como último dato a conocer antes de someterse a una cirugía estética, es que “el día de tu operación debes ir en ayuna, sin aros, anillos ni ningún accesorio ni siquiera extensiones ni maquillaje, incluso te harán sacarte el esmalte de uñas si llevas puesto, tampoco puedes echarte perfume ni colonias ni lociones en general. Olvídate del desodorante y la ducha que sea solo con agua“, así cuenta desde su experiencia Tamara Zúñiga Sinsay, quien hace cinco años atrás se sometió a un aumento mamario en la Clínica Las Condes.
Por otro lado, en el postoperatorio de una de las cirugías más comunes como la liposucción y la Abdominoplastia, el cuerpo tiene que superar un trauma muy importante al cual ha sido sometido, por esto es clave la nutrición en los primeros 15 días postoperatorios y debe basarse en el consumo importante de carbohidratos (como sustancias generadoras de energía) y proteínas (como sustancias reparadoras), con el fin de evitar complicaciones y tener una excelente cicatrización.
Posteriormente, la nutrición se debe ajustar al consumo individual de calorías, es decir, a la energía que necesitas diariamente para realizar las tareas cotidianas en el trabajo, el estudio y en la actividad física; en éste momento, la dieta puede basarse en un 50% por el consumo de proteínas, 25% de carbohidratos y 25% de grasas.
Esta distribución de los alimentos tiene el objetivo de ir modificando poco a poco el hábito alimenticio y al mismo tiempo de cambiar el metabolismo.
Cuando buscamos un rango mayor en la pérdida de peso (buscando un peso ideal), es un error pensar que lo vamos a lograr dejando de comer y sufriendo de hambre. Esto es FALSO. Solo debemos asesorarnos de manera integral, para ajustar de nuevo el plan de alimentación: la dieta debe hacerse fraccionada, es decir, comer varias veces durante el día, aumentar el consumo de proteínas (hasta en un 70% del total de los alimentos) y evitar esos grandes períodos de ayuno; el fin: poder acelerar el metabolismo y la quema de grasas que se obtiene de esta forma de nutrición.
Otro factor importante a considerar, tiene directa relación con la edad y los tiempos recuperación y cicatrización, ya que estos no son iguales para un millennial en comparación a alguien de la tercera edad por ejemplo. ““En el caso de la cicatrización la edad del paciente si puede influir debido a que con mayor edad el proceso de recuperación es más lento y las cicatrices son más suaves, a diferencia de los más jóvenes la piel tiende a recuperarse más rápido formando cicatrices más gruesas” afirma Stefan Danilla, Secretario General de la Sociedad Chilena de Cirugía Plástica al portal de América Retail.
El bisturí en el panorama mundial
La Sociedad Internacional de Cirugía Plástica Estética (ISAPS) publicó las últimas cifras mundiales de procedimientos estéticos realizados durante el último año, demostrando que la demanda global de tratamientos cosméticos y estéticos aumentó en un 9%. Además, Estados Unidos se mantiene como el país donde se practican más cirugías a nivel mundial.
Brasil, México y Colombia también figuran entre los once países con mayor demanda de este tipo de procedimientos.
Por su parte, Chile no se queda atrás en cuanto al aumento de estas prácticas. Las cifras oficiales muestran que en el país las cirugías están creciendo exponencialmente, alrededor de un 20% cada año.
En términos de género, las mujeres continúan siendo las que más acuden a las consultas de cirujanos plásticos certificados en el mundo, representando el 86,2% del total de procedimientos. Sin embargo, el informe arrojó que los hombres en Chile están cada día más abiertos a someterse a algún arreglo físico, alcanzando el 20% del total de procedimientos, mientras que en el resto del mundo representan un 13,8% de los casos.
El gráfico a continuación entrega las cifras de las preferencias en cirugías estéticas alrededor del mundo según la ISAPS:

Como se puede apreciar, a pesar de que las cirugías estéticas parecen ir en aumento no sólo en Chile, sino que en el mundo entero, y cada vez abarcan más públicos de distintos rangos etarios y género. Pero al mismo tiempo resulta fundamental estar bien informado antes de efectivamente someterse a un procedimiento quirúrgico, ya que las recomendaciones, cuidados y especialmente los riesgos son bastantes a tener en consideración. Además, en el caso de Chile tanto la legislación, como las fiscalizaciones, no son precisamente efectivas para evitar los resultados fatales como el caso de Tahía o de Cynthia.