Operaciones

Aumento mamario

La cirugía de aumento mamario con prótesis es una de las operaciones más frecuentes dentro de la estética corporal. El aumento mamario se puede realizar con implantes mamarios de gel de silicona o con suero fisiológico. Existen en diferentes tamaños y formas con variados materiales tanto en su interior como en su superficie. Las formas son generalmente ovaladas, redondeadas.

Los implantes mamarios son una de las herramientas más utilizadas en cirugía plástica y su utilidad es transversal para la estética como para la cirugía reconstructiva.

Si el suero fisiológico se saliera, puede ser fácilmente reabsorbido por el cuerpo humano. Tiene el inconveniente que se puede infectar por lo que se prefiere el implante con gel de silicona.

Los implantes de silicona son preferidos por las mujeres porque son los que más se asemejan a una glándula normal tanto por su forma como por la sensación que dan a la palpación.

Las opciones para hacer la incisión quirúrgica son la inframamaria (es la más frecuente), periareolar y transaxilar. Es muy importante que el cirujano plástico que realiza esta intervención quirúrgica sea una persona de experiencia para evitar los riesgos y complicaciones inherentes a este tipo de cirugía.

Este requerimiento requiere de varias consideraciones que debes tener en cuenta antes de tomar la decisión:

  • Tener un desarrollo mamario completo
  • Contar con evaluación médica del especialista
  • Tener sus patologías asociadas estabilizadas
  • Descartar cualquier patología mamaria activa mediante ecografía mamaria y/o mamografía.
  • No fumar o haber suspendido el hábito 3 semanas antes del procedimiento.
  • Suspender medicamentos que alteren la coagulación (aspirinas, por ejemplo).

Las prótesis mamarias pueden ser ubicadas debajo del músculo pectoral o sobre éste. La ubicación final siempre la decide el médico, ya que depende de la anatomía de cada paciente, de la cantidad de tejido mamario que tenga y del tamaño de prótesis que se elija.

Postoperatorio

Es una cirugía que produce escaso dolor en el postoperatorio, más qunada molestias ocasionales. Después de la cirugía las pacientes deben permanecer entre 7 a 10 días sin realizar fuerza con los brazos ni pectoral y deben usar un sostén deportivo especial por un mes y medio para favorecer su recuperación.

Una mujer que se somete a un implante mamario debe tener control con su médico una vez al año, como parte de su evaluación mamaria de rutina. Los implantes, no tienen una vida útil determinada pero las propias empresas sugieren que deben ser reemplazados cada 10 años.

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